Uno de los más solicitados, parece que estén hechos los unos para los otros, esta combinación de sencha, jengibre y flores de caléndula, todos ellos de cultivo orgánico, resulta aromática y sabrosa, un puntito picante para los amantes de los sabores cítricos.
Resulta un té ideal para media mañana o media tarde, ni muy intenso, ni muy flojo, un té con personalidad y carácter. Al llevar jengibre no recomiendo tomarlo frío, se saborea en toda su plenitud caliente.
Para elaborar el té verde el agua no debe hervir, 70º u 80º como máximo y el tiempo de infusión debe estar entorno a los 2 o 3 min.