La mezcla de la manzana con la canela, el clavo, el hinojo y un ligero toque de regaliz, toda una fiesta para nuestros sentidos en este rooibos que huele a infancia, a tardes de otoño en la cocina y a las tartas de mamá.
Una infusión hogareña, para compartir y disfrutar.
Preparación, con el agua a 100º se deja infusionar de 7 a 10 min.